6 nov 2013

Hernán Venegas y el Festival de Cine Documental de Chiloé

 
Una mirada retrospectiva y con firmes proyecciones hizo el profesor de historia de la Universidad de Santiago de Chile y director del Festival de Cine Documental de Chiloé, Fedochi, Hernán Venegas, respecto a la evolución que ha tenido este certamen que surgió hace nueve años en el Archipiélago.
Venegas que por estos días encabeza el amplio programa de actividades que se focaliza en Castro y con una itinerancia por distintas comunas chilotas analiza el buen momento por el cual cruza el evento audiovisual y cómo el género documental ha conquistado un complejo espacio en la industria de la producción cienematográfica en Chile.

Una treintena de películas por cada versión dan cuenta del volumen de filmes que se han proyectado a lo largo de casi una década destacando temáticas relativas a movimientos sociales y rescate histórico y patrimonial con una mirada desde la Patagonia.

¿Cómo sorprende esta novena versión al Festival de Cine Documental de Chiloé?
Creo que haciendo una especie de análisis hemos ido supliendo algunas carencias, mejorando el contenido de la programación, hemos ido también ampliando nuestra cobertura dentro del espacio de Chiloé y saliendo fuera de la isla, hemos incrementado el número de talleres y consolidado algunas actividades como es una muestra regional.

Qué tan importante ha sido la irrupción del género documental en el mercado cinematográfico chileno?
En general como que el documental se ha ido afirmando como propuesta, hace diez años  era muy difícil mostrar documentales, la gente tampoco estaba muy habituada a verlo, tampoco había tanta cobertura dentro de la televisión, entonces trabajar con documentales era casi una apuesta.

Las temáticas del Fedochi están bien definidas como línea editorial. ¿En qué se basan fundamentalmente?
Establecimos una línea de temáticas desde un comienzo, eran tres a cuatro líneas interesantes que hemos ido afirmándonos en esa, desde los temas patrimoniales, historias locales, recuperación de la memoria histórica vinculada al cine y documental específicamente y movimientos sociales que además se han ido levantando últimamente.

Por qué cree que es importante para los realizadores nacionales elaborar sus proyectos e integrarlos a este festival en Chiloé?
Lo que pasa es que en general el documental todavía le cuesta entrar a los circuitos más comerciales, por lo tanto una de las alternativas que hay es que circulen a través de los distintos festivales, nacionales o extranjeros, como primera prioridad la gente sabe que una película puede tener un cierto éxito a nivel local.
Un especial rol han tenido producciones audiovisuales con una perspectiva insular y donde han destacado realizadores chilotes ejemplificándose el éxito de Luis “Cicleto” Tapia con su creación “34 años y 1 Día” que conquistó el primer lugar en diciembre de 2009.

¿Es en definitiva el Festival de Cine Documental una plataforma para incipientes cineastas?
Creemos que igual es una buena plataforma, además porque se conoce gente, a otros productores, la misma gente del Santiago Festival Internacional de Cine que nos acompañan esta vez, puede ser una buena alternativa para establecer vínculos y crear redes.

¿Qué valor tiene la presencia de destacados cineastas que llegan a Chiloé para participar en Fedochi?
Al final todos estos festivales desarrollan una trayectoria, entonces diez años es más que suficiente para ser conocidos en los circuitos. Esos realizadores puede que estén muy interesados en mostrar sus obras, pero también estos espacios les permiten acceder a gente que habitualmente no los ve.

Por Luis Contreras.

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